La Ley de Dependencia y la atención a los mayores protagonizó la jornada política de ayer. Y es que la presencia del presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, en la clausura en Ciudad Real de la Conferencia sobre Mayores, propició que tanto los populares como los socialistas hablaran de compromisos o logros hacia los mayores.
Tanto Rajoy como la presidenta regional del PP, María Dolores de Cospedal prometieron no congelar las pensiones; además, el presidente del PP aseguró que potenciará la Ley de Dependencia para que disponga de la financiación adecuada y se aplique por igual en todas las comunidades autónomas. Como reto principal, aseguró que tiene la creación de empleo, y después, aunque no menos importante, que la Ley de Dependencia «no sea papel mojado», ya que el Ejecutivo actual le ha dedicado «mucha demagogia y muchos telediarios», pero no dota la norma de la financiación adecuada.
Su objetivo principal con la Ley de Dependencia será hacerla funcionar como «un instrumento útil», para lo que es imprescindible, aseguró, su «armonización». «No queremos 17 leyes diferentes; creemos en la igualdad de todos, queremos que haya los mismos baremos de evaluación en todas las comunidades y que los servicios sean equitativos y de calidad», recalcó Rajoy antes de concretar su última promesa al respecto: que la norma cuente con la financiación adecuada, no la que ha conferido el Gobierno.
Como suele ser habitual las declaraciones de los dirigentes del PP fueron contestadas de inmediato, en esta ocasión, tanto por el consejero de Salud y Bienestar Social de Castilla-La Mancha como por el secretario de Organización del PSOE.
El primero, Fernando Lamata, aprovechando su comparecencia para hablar del Plan Integral de Personas Mayores, que ayer trató el Consejo de Gobierno, opinó sobre el acto en el que intervenía Mariano Rajoy y dijo que le parece bien que el presidente nacional del PP venga a Castilla-La Mancha porque así «puede aprender a hacer las cosas bien». «En Castilla-La Mancha podemos dar un buen ejemplo de atención a mayores», indicó.
Y citó la red de residencias, el servicio de teleasistencia o la atención domiciliaria, lo que conforma un «sistema ejemplar». Por eso, «el señor Rajoy hace bien en venir aquí para no intentar hacer lo que hizo cuando gobernó como vicepresidente con José María Aznar cuando se redujo en diez mil millones de euros anuales el gasto en políticas sociales», pues, con ese dinero se podría haber financiado una Ley de Dependencia cada año. Y eso que fueron años de bonanza económica, aseguró Lamata, quien recordó también las declaraciones que hizo hace unos meses Rajoy alabando la política del Gobierno de James Cameron en Gran Bretaña.
Preguntado sobre si el PP podría desmontar el sistema de sanidad pública de llegar a gobernar en la región, Lamata consideró que «hay indicios» que apuntan a esa dirección e insistió en que durante los gobiernos de Aznar hubo una «descapitalización» del sistema público, pues en 2002 cuando en Castilla-La Mancha se recibieron las transferencias sanitarias había una sanidad «depauperada».
Precisó que ese deterioro de lo público no lo llevó a cabo el PP mediante un «desmontaje total» ni desactivando leyes, sino recortando financiación, también al sistema educativo, e incentivando los seguros privados. Si lo hará o no el PP de llegar a gobernar en Castilla-La Mancha, Lamata lo desconoce, aunque espera que Barreda obtenga el respaldo de la mayoría de la región.
No obstante, indicó que hay comunidades autónomas gobernadas por el PP que están haciendo «buena gestión» y trabajan de forma «razonable» como es Castilla y León, pero, en la mayoría de los casos, están en el furgón de cola en asistencia sanitaria y aplicación de la Ley de Dependencia.
Elogios a Barreda
Hasta el secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, defendió la gestión del Gobierno de Barreda respecto a la Ley de Dependencia. Indicó que espera que el líder del PP, Mariano Rajoy, «tome ejemplo de la gestión del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, que es la que mejor aplica la Ley de Dependencia de toda España». Iglesia remitió ayer un comunicado tras la visita de Rajoy a Ciudad Real.
El dirigente socialista estimó que el presidente del PP «no sólo puede aprender mucho, sino que debería incluso tomar nota de lo que se hace en Castilla-La Mancha para aplicarlo luego en las regiones gobernadas por el PP». También criticó a Cospedal por considerar que «quiere estar en misa y repicando». «Alguien que dice que tiene aspiraciones (de gobernar) debería dedicarse en cuerpo y alma a Castilla-La Mancha y a su gente» en lugar de viajar a esa región «una vez a la semana», criticó el también presidente de la Comunidad de Aragón
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