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.Viernes 29 de abril de 2011
laopiniondezamora.es
Presidente del consejo directivo de Auxilia
Perfil : Miguel Soriano Sánchez
«Un discapacitado físico está
limitado exclusivamente por
su nivel cognitivo»
«El principal interés de las personas que han reclamado nuestra ayuda en Zamora es la formación para el empleo y autoempleo»
Miguel Soriano Sánchez, presidente de Auxilia.
Foto Javier de la Fuente
Foto Javier de la Fuente
B. BLANCO GARCÍA De origen francés, la asociación Auxilia de ayuda a personas discapacitadas trabaja en España desde 1952 y en breve abrirá una nueva sede en Zamora. Su presidente, Miguel Soriano Sánchez, visitó recientemente la ciudad para reunirse con la veintena de usuarios que ya existen en la provincia.
-¿Cuáles son las prioridades para que Auxilia comience a funcionar en Zamora?
-Auxilia es una asociación de voluntariado, así que lo primero que necesitamos son voluntarios. Sin ellos no hacemos nada. A partir de ahí se les formará en una metodología propia de la asociación, denominada Plan de Actuación Integral.
-¿En qué consiste?
-Es un instrumento que utiliza el voluntariado de Auxilia para analizar y evaluar a las personas en sus capacidades. Todos somos discapacitados en algún sentido, pero en algunas personas es más evidente que en otras y hay que saber hasta dónde son capaces de llegar y hasta dónde ellos son capaces de querer llegar, porque es una decisión personal. Cuando se tenga el perfil determinado se le recomendará o asignará un trabajo adecuado o los instrumentos para que lo encuentre.
-¿Cuál es el perfil del voluntario que busca Auxilia?
-Fundamentalmente tiene que ser mayor de edad o menor autorizado por sus padres. Preferentemente queremos personas que estén en los primeros cursos universitarios o acabando el Bachillerato. Sobre todo se busca estudiantes de la rama de Trabajo Social, Relaciones Laborales, Pedagogía, Psicopedagogía, Psicología, Medicina o Enfermería, porque en Auxilia hay desde voluntariado directivo, especializado, administrativo y de base.
-¿Los jóvenes son el futuro de Auxilia?
-Auxilia es joven y dinámica y buscamos en las delegaciones jóvenes que se pongan a la cabeza por el recambio generacional y además que estén preparados profesional y académicamente. Se trata de buscar personas que quieran sentirse útiles a unas edades en las que se les suele ofrecer otras cosas. Ahí es donde se ve realmente a gente sensible y solidaria.
-¿Cuáles son las principales necesidades de los usuarios de Zamora?
-El principal interés de las personas que han reclamado nuestra ayuda es fundamentalmente la formación para el empleo y el autoempleo.
-¿Tener un trabajo ayuda a normalizar la vida de esas personas?
-La normalización de cualquier persona con discapacidad o diversidad funcional está básicamente en el trabajo y aquí es lo que nos están demandando. La mayoría son muy autónomas en muchos sentidos, con una vida propia. Lo que necesitan es esa formación y facilidad para poder acceder al empleo, ya sea público, privado o autoempleo.
-¿Tiene Auxilia algún proyecto ya pensado para desarrollar en Zamora en este sentido?
-Vamos a poner en marcha un proyecto importante que lo abandera la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE). Se llama «Discajob» y trata de entrenar a las personas para que de alguna manera sepan buscar de forma activa empleo en Internet y aprendan a manejar una serie de herramientas que se van a poner a su disposición a través de una plataforma. Eso es fundamental no solo para Zamora capital, sino para la cantidad de discapacitados que se mueven en un medio rural muy hostil para ellos.
-¿El teletrabajo es una salida profesional para estas personas?
-Por supuesto. Nosotros les daríamos formación para que tengan las destrezas y habilidades adecuadas para manejar correctamente Internet, teleinformación o atender adecuadamente a un cliente. En Lugo existe un proyecto similar ya y lo que quieren es ampliar el territorio. Trabajamos con una empresa que también funciona como una fundación e intenta ofertar unos precios competitivos para poder contratar a este colectivo.
-¿Todavía falta sensibilidad en la sociedad con respecto a estas personas?
-Desgraciadamente sí, aunque puedan hacer de todo. Una persona con discapacidad física y motora está limitada solo y exclusivamente por su nivel cognitivo y su capacidad de aprendizaje. Esa persona puede tener desde una formación básica hasta una universitaria. Lo que hay que hacer es adaptar y hacerle accesible el puesto de trabajo y será una persona que trabajará sus ocho horas como cualquier otro ciudadano.
-¿Es Zamora una ciudad adapta a la gente con discapacidades físicas?
-Tiene muchos problemas de accesibilidad. En Lugo, por ejemplo, que es una ciudad con tanta dificultad orográfica como Zamora, nuestra delegación allí se ha especializado en accesibilidad y movilidad y se puede hasta subir a la muralla en silla de ruedas.
-¿Cuál es el desarrollo de Auxilia en sus casi sesenta años de vida?
-Actualmente contamos con 15 centros en todo el país, además de tres fundaciones que atienden en Barcelona, Valencia y Sevilla. Esos son centros profesionalizados, donde hay desde atención temprana hasta colegio de educación especial, centros ocupacionales o residencias y servicio de ayuda a domicilio.
Sevilla, 1958
Miguel Soriano Sánchez es médico de la Administración General del Estado y estudió la carrera de Medicina en la universidad de su Sevilla natal. Allí mismo completó y amplió su formación con el estudio de las carreras de Educación Especial y Logopedia. En la actualidad, ejerce como médico de empresa. Está casado y desde 2007 es el presidente del consejo directivo de la asociación Auxilia.
-¿Cuáles son las prioridades para que Auxilia comience a funcionar en Zamora?
-Auxilia es una asociación de voluntariado, así que lo primero que necesitamos son voluntarios. Sin ellos no hacemos nada. A partir de ahí se les formará en una metodología propia de la asociación, denominada Plan de Actuación Integral.
-¿En qué consiste?
-Es un instrumento que utiliza el voluntariado de Auxilia para analizar y evaluar a las personas en sus capacidades. Todos somos discapacitados en algún sentido, pero en algunas personas es más evidente que en otras y hay que saber hasta dónde son capaces de llegar y hasta dónde ellos son capaces de querer llegar, porque es una decisión personal. Cuando se tenga el perfil determinado se le recomendará o asignará un trabajo adecuado o los instrumentos para que lo encuentre.
-¿Cuál es el perfil del voluntario que busca Auxilia?
-Fundamentalmente tiene que ser mayor de edad o menor autorizado por sus padres. Preferentemente queremos personas que estén en los primeros cursos universitarios o acabando el Bachillerato. Sobre todo se busca estudiantes de la rama de Trabajo Social, Relaciones Laborales, Pedagogía, Psicopedagogía, Psicología, Medicina o Enfermería, porque en Auxilia hay desde voluntariado directivo, especializado, administrativo y de base.
-¿Los jóvenes son el futuro de Auxilia?
-Auxilia es joven y dinámica y buscamos en las delegaciones jóvenes que se pongan a la cabeza por el recambio generacional y además que estén preparados profesional y académicamente. Se trata de buscar personas que quieran sentirse útiles a unas edades en las que se les suele ofrecer otras cosas. Ahí es donde se ve realmente a gente sensible y solidaria.
-¿Cuáles son las principales necesidades de los usuarios de Zamora?
-El principal interés de las personas que han reclamado nuestra ayuda es fundamentalmente la formación para el empleo y el autoempleo.
-¿Tener un trabajo ayuda a normalizar la vida de esas personas?
-La normalización de cualquier persona con discapacidad o diversidad funcional está básicamente en el trabajo y aquí es lo que nos están demandando. La mayoría son muy autónomas en muchos sentidos, con una vida propia. Lo que necesitan es esa formación y facilidad para poder acceder al empleo, ya sea público, privado o autoempleo.
-¿Tiene Auxilia algún proyecto ya pensado para desarrollar en Zamora en este sentido?
-Vamos a poner en marcha un proyecto importante que lo abandera la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE). Se llama «Discajob» y trata de entrenar a las personas para que de alguna manera sepan buscar de forma activa empleo en Internet y aprendan a manejar una serie de herramientas que se van a poner a su disposición a través de una plataforma. Eso es fundamental no solo para Zamora capital, sino para la cantidad de discapacitados que se mueven en un medio rural muy hostil para ellos.
-¿El teletrabajo es una salida profesional para estas personas?
-Por supuesto. Nosotros les daríamos formación para que tengan las destrezas y habilidades adecuadas para manejar correctamente Internet, teleinformación o atender adecuadamente a un cliente. En Lugo existe un proyecto similar ya y lo que quieren es ampliar el territorio. Trabajamos con una empresa que también funciona como una fundación e intenta ofertar unos precios competitivos para poder contratar a este colectivo.
-¿Todavía falta sensibilidad en la sociedad con respecto a estas personas?
-Desgraciadamente sí, aunque puedan hacer de todo. Una persona con discapacidad física y motora está limitada solo y exclusivamente por su nivel cognitivo y su capacidad de aprendizaje. Esa persona puede tener desde una formación básica hasta una universitaria. Lo que hay que hacer es adaptar y hacerle accesible el puesto de trabajo y será una persona que trabajará sus ocho horas como cualquier otro ciudadano.
-¿Es Zamora una ciudad adapta a la gente con discapacidades físicas?
-Tiene muchos problemas de accesibilidad. En Lugo, por ejemplo, que es una ciudad con tanta dificultad orográfica como Zamora, nuestra delegación allí se ha especializado en accesibilidad y movilidad y se puede hasta subir a la muralla en silla de ruedas.
-¿Cuál es el desarrollo de Auxilia en sus casi sesenta años de vida?
-Actualmente contamos con 15 centros en todo el país, además de tres fundaciones que atienden en Barcelona, Valencia y Sevilla. Esos son centros profesionalizados, donde hay desde atención temprana hasta colegio de educación especial, centros ocupacionales o residencias y servicio de ayuda a domicilio.
Sevilla, 1958
Miguel Soriano Sánchez es médico de la Administración General del Estado y estudió la carrera de Medicina en la universidad de su Sevilla natal. Allí mismo completó y amplió su formación con el estudio de las carreras de Educación Especial y Logopedia. En la actualidad, ejerce como médico de empresa. Está casado y desde 2007 es el presidente del consejo directivo de la asociación Auxilia.
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