sábado, abril 23, 2011
¿Un estado hipócrita? Sí, el nuestro lo es.
...
A pesar que yo siempre respetaré la decisión de cada uno en sus inclinaciones religiosas, ¡Dios me libre!, es en estos días que vivimos donde se puede hablar de una hipocresía gubernamental que es demasiado notoria.
Y vengo a confirmar y afirmar rotundamente, que si bien por una parte se reconoce como un estado aconfesional, demuestra sobre el día a día que pasamos, estamos dentro de una confesionalidad manifiesta y en manos de unas personas, no quiero dignificarlos a mayor altura, que son discriminadas positivamente en favor de su proselitismo proceder.
No quiero con esta proclama ofender a quienes creen fervorosamente con sus ideas; no me meto con ellas, solo pongo de manifiesto que las otras confesiones religiosas están siendo ninguneadas sistemáticamente por un gobierno que se está comprobando con el tiempo, que siendo del color que sea, bien gobierne el PP o el PSOE, ambos coinciden con una hipocreséa poco disimulada que consiente durante unos días realizar un costosisimo activismo de guardias, componentes del voluntariado del orden público y demás participantes de unas manifestaciones claramente proselitistas que, curiosamente, chocan con una prohibición que se les hace a los demás, Iglesia católica aparte. Y vds. me diran que genera, por otra parte, una riqueza dificil en despreciar. Sí, es cierto, pero igualmente la crean fiestas semejantes a la Fallas de Valencia, las Hogueras de Sant Joan ,de Alicante; el 23 de abril, que es el día de Sant Jordi, donde Alcoy ha tenido que mover sus días de celebración por coincidir con los de Semana Santa, etc.
Nos asombramos de los gastos efectuados en el boato del Papa cuando estuvo en Valencia. Nos quejamos que gracias a el unos aprovechados y corrompidos llenasen sus alforjas, sin embargo esto y aun siendo la población mayoritariamente católica, estamos fomentando gubernamentalmente una discriminación que resulta contraria a su manifiesto en la Constitución.
¿Vds. lo entienden? ¡Yo no, me avergüenza un estado de cosas como esta!
De antemano espero que unas voces acérrimas e interesadas se manifiesten quejosas ante la manifestación de mis palabras, lo se, pero no podía pasar sin decirlo.
Cada día que pasa entiendo mejor a los que manifiestan su disconformidad con tanta hipocresía.
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A pesar que yo siempre respetaré la decisión de cada uno en sus inclinaciones religiosas, ¡Dios me libre!, es en estos días que vivimos donde se puede hablar de una hipocresía gubernamental que es demasiado notoria.
Y vengo a confirmar y afirmar rotundamente, que si bien por una parte se reconoce como un estado aconfesional, demuestra sobre el día a día que pasamos, estamos dentro de una confesionalidad manifiesta y en manos de unas personas, no quiero dignificarlos a mayor altura, que son discriminadas positivamente en favor de su proselitismo proceder.
No quiero con esta proclama ofender a quienes creen fervorosamente con sus ideas; no me meto con ellas, solo pongo de manifiesto que las otras confesiones religiosas están siendo ninguneadas sistemáticamente por un gobierno que se está comprobando con el tiempo, que siendo del color que sea, bien gobierne el PP o el PSOE, ambos coinciden con una hipocreséa poco disimulada que consiente durante unos días realizar un costosisimo activismo de guardias, componentes del voluntariado del orden público y demás participantes de unas manifestaciones claramente proselitistas que, curiosamente, chocan con una prohibición que se les hace a los demás, Iglesia católica aparte. Y vds. me diran que genera, por otra parte, una riqueza dificil en despreciar. Sí, es cierto, pero igualmente la crean fiestas semejantes a la Fallas de Valencia, las Hogueras de Sant Joan ,de Alicante; el 23 de abril, que es el día de Sant Jordi, donde Alcoy ha tenido que mover sus días de celebración por coincidir con los de Semana Santa, etc.
Nos asombramos de los gastos efectuados en el boato del Papa cuando estuvo en Valencia. Nos quejamos que gracias a el unos aprovechados y corrompidos llenasen sus alforjas, sin embargo esto y aun siendo la población mayoritariamente católica, estamos fomentando gubernamentalmente una discriminación que resulta contraria a su manifiesto en la Constitución.
¿Vds. lo entienden? ¡Yo no, me avergüenza un estado de cosas como esta!
De antemano espero que unas voces acérrimas e interesadas se manifiesten quejosas ante la manifestación de mis palabras, lo se, pero no podía pasar sin decirlo.
Cada día que pasa entiendo mejor a los que manifiestan su disconformidad con tanta hipocresía.
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Publicado por Teuladí en 09:03
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