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También, como no, la salud es algo que a todos nosotros nos preocupa, para eso no dejamos de ser perfectamente iguales del resto, por eso les transcribo este artículo que Mundo Senior ha publicado en su boletín informativo mensual que ahora reproducimos seguidamente,
Aprovechando la festividad del día de Sant Jordi, diremos que desde hace mucho tiempo, muchos años atrás y al enterarme de la ancestral costumbre catalana, me gustó y adopté como mía la de ofrecer a mi amada esposa una rosa sin arreglar, rodeada de la cinta blanca de San Jorge. Nada más.
Posteriormente las librerías editoriales pondrían de moda el obsequiar a la pareja con un libro, por eso es que hoy se celebra el día del libro y la rosa.
Por aquellas fechas me era desconocida la costumbre valencianaa de la tradicional ofrenda a tu pretendida de una "mocaorada" a celebrar en la "Diada" de cada año donde se pedía a su amada la aceptación de dicho presente que consistía en obsequiarle con aquel presente que dentro de un atado pañuelo de seda se le proporcionaba dulces variados, caramelos, bombones...
El caso es que en el Páis Valencià también se tenía esa costumbre en donde al ser aceptada se daba a entender que la moza aceptaba sus relaciones con la persona amada. Eran entonces el inicio de una relación amorosa.
Como ya digo, desconocía esta costumbre nuestra, de ahí que haya adoptado el día de Sant Jordi como muestra a mis seres amados, ya no se trata únicamente de mi esposa, también se le da participación a mis hijas ya que ellas han venido a este mundo fruto de nuestro mutuo amor.
Por eso hoy compraré 3 rosas rojas, las rosas rojas de mi apasionado amor que encintadas cada una con un lazo blanco, serán la ofrenda que en este señalado día les doy a mis amores.
De todas formas no deja de ser algo que se celebra aquí en "els paisos catalans"y yo me considero antes que todo valenciano pero a su vez soy catalán del sur, como bien diría en su bonita canción el gran músico y poeta Lluís Llach.
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