...
Había una vez...
UN CIRCO DEL QUE ERA PROPIETARIO EL P.P.
Hablando
telefónicamente esta mañana con una de mis mejores amigas que se
encuentra ausente al vivir en otra ciudad, comentamos los sinsabores que
la vida en estos momentos nos proporcionaba de las huestes del P.P., y
no dejábamos de asombrarnos de la incapacidad tan manifiesta que
demostraban cuando con lo único que pensábamos no se atreverían eran con
las pensiones que sostenían a media España que se las arreglaba sin
ninguna prestación del paro al no tener trabajo, pero sorprendentemente
nos ha dejado perplejos al comprobar que con la ayuda del Consejo de
Sabios, salidos de las más sospechosas nóminas bancarias nos han
expropiado nuestros inalienables percepciones como deberían ser nuestras
pensiones.
¿Con
los sueldos que corren por el mercado laboral no pretenderán para nada
que superemos la crisis mientras que cuanto menos se cobra menor son los
ingresos para la Caja de la Sefguridad Social, acaso han contemplado
esta constante? ¿Saben estos mezquinos de contabilidad?...
Mucho
nos tememos que pasados los años veamos que no podamos pagar, ya no
solo la manutención familiar, a la que les ayudamos a los hijos que
están en el paro y sin cobrar nada, sino siquiera los recibos de la luz,
el agua, el casero y un largo etc. de compromisos contraídos por no
tener otra posibilidad para poder llegar al final de cada mes.
Resulta
muy bochornoso, incluso para la propia derecha, que la deuda la paguen
solamente unos pocos y que se les exima a ellos los que poseen grandes
sueldos a su contribución a la misma. Es incomprensible que la propia
Iglesia, bueno ella no, el Clero, esté callado mientras ve como en estos
tiempos de crisis sus peculios particulares se han llegado a verse
incrementados, ¿dónde queda la pobreza que la debiera distinguir cuando
la mitad de su población está pasando hambre física, que ya no de la del
consumismo que ellos tanto alientan para conseguir superarla.
Esta
es la redacción de un artículo de opinión que, precisamente, lo hace
uno que se ha retirado de la política activa, que yo sepa al menos, y lo
hace valorando que fueran las palabras pronunciadas por Gónzalez Pons
en un acto público realizado en Gandía buscando votos para su partido,
sin entender que esto mismo a el le afectaba. Así será el pobre. Pero
vamos con el artículo de opinión redactado por Ängel Luna, antiguo
alcalde de la ciudad que se dedico a sanear económicamente y no como
ellos que se afanaron por endeudarla.
Y
para que les quiero abundar más, lo dejaremos para otro día no sea cosa
que se me vayan a cansar, que temas nos dan mucho más de lo que
queremos reflejar.
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