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Un tranvía que da miedo
A ningún ciudadano se le podría hacer imaginar que tras la marcha provocada por la corrupción y otras muchas causas del entonces Muy Honorable President En Francesc Camps, tuviéramos que asistir a un lamentable suceso como el protagonizado ayer por un grupo de malhumorados ciudadanos hartos de tanta corrupción y acciones unidas a tanta hipocresía como la demostrada por el impresentable y timorato de su incompetente sucesor En Albert Fabra, resulta indignante que tras cerca de tres años buscando un empresario que se hiciera cargo de este servicio público, se ponga en funcionamiento con la misma fórmula como tantas y tantas veces denunció en su día el Comité de afectados por el ERE planteado por los trabajadores del TRAM de la comunidad valenciana por este mismo Consell que ha reconsiderado su postura y ha iniciado su funcionamiento con los propios trabajadores que ahora parece haber rescatado. Su pretensión era la privatización pero su fallo que ha resultado ser clamoroso. La reinauguración (ya lo hiciera anteriomente otra vez Camps) efectuada por Albert Fabra y que finalmente acometió de forma tardía, ha venido a demostrarnos a todos los alicantinos que nunca se nos ha considerado como lo hicieran con otros ciudadanos, y no quiero señalar a ninguno de ellos pero a buen entendedor... Anteriormente los utilizaron como arma arrojadiza para llevarse el gatos al agua.
Mucho menos que para dicho acto desplegase más policía que si se tratase de una reunión del G-20 y pese a todo hiciera el lamentable ridículo de su huida hacia la estación de los Luceros para proceder a ella protegido por una considerable dotación de policía por el miedo demostrado ante 200 ciudadanos, únicamente y a pesar de tanta protección de la policía local, la nacional, Guardia Civil... ¿Queremos mayor ridículo de un President que dice gobernar para "todos" los valencianos... De veras ¿Nos lo creemos?...
Pero todo llega a su límite, no podemos ni debemos consentir que esta espiral de delincuencia prosiga in crescendo de una manera continuada, todo debe tener un final si es que todo queremos que tenga un buen desenlace, ya se alzan voces dentro de quienes dieron su voto a estos irresponsables y que reclaman el recto proceder de sus elegidos pero con lo que hay ¿Qué quieres?...
Mientras tanto no se avergüenzan en pedirle a las Cortes que condenen la cadena humana formada por la independencia, que otra vía les queda sino realizarla en defensa de unos sátrapas que nos están a todos esquilmando nuestras contribuciones al estado mientras que este nos responde con más corrupción que mete de lleno a su máximo responsable:
Mariano Rajoy. Posiblemente sea la solución sus dimisiones y unas elecciones anticipadas con una votaciones abiertas y no cerradas como ahora es el caso y que tan malos resultados para la democracia nos ha reportado.
Todavía querrán que los dependientes les aplaudamos, vergüenza debiera darles, pero no hay caso, ni la tienen ni la conocen, de lo contrario ya se hubiesen marchado y eso que el pueblo no los quiere y bien que se lo han demostrado.
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