...
Una elección difícil para Francisco Camps: o paridad o pesos pesados
VALENCIA. Tras la victoria electoral, el presidente de la Generalitat y líder del PPCV, Francisco Camps, se ha dado unos días de asueto para descansar tras la campaña y, además, para alcanzar su plena recuperación después de la operación de hernia que dificultó el camino a los comicios del máximo responsable 'popular'.
Mientras Camps se toma una respiro, los miembros del Gobierno valenciano esperan que pasen los días para conocer los planes del presidente de la Generalitat. El anuncio de la reducción de consellerías -unas directrices marcadas desde Génova, sede del PP nacional-, obligará a la salida de dirigentes del Ejecutivo valenciano.
El 'puzzle' que debe resolver Camps, no obstante, debería ajustarse a dos normas que suelen aplicarse en la conformación de cualquier gobierno: la territorialidad y la paridad. Pese a su absoluta independencia, el presidente sí se encontrará acotado por estos dos factores a la hora de confeccionar su equipo.
En la actualidad, el Consell está compuesto de 13 carteras, lo que implica una reducción de tres para ajustarse a las directrices de Madrid. Gran parte de las fuentes consultadas estiman que no repetirá la titular de Cultura, Trinidad Miró, y Belén Juste, la máxima responsable de Turismo. La primera, según fuentes del PPCV, se centrará en apoyar al vicesecretario de Organización del partido en Alcoi y también secretario autonómico de Cultura, Rafael Miró, para tratar de recabar el respaldo local y dominar al sector zaplanista en este municipio. La segunda, ocupará escaño en Les Corts.
Las fuentes consultadas también creen que el conseller de Infraestructuras, Mario Flores, no continuará, dado que es uno de los que menor peso político y orgánico posee en el Gobierno valenciano.
A esto hay que unir que dada la reducción del número de estos altos cargos, lo más probable es que el próximo presidente de Les Corts -todo apunta a Alejandro Font de Mora- salga de entre los componentes del actual Gobierno valenciano, aunque hay quien cree que la opción podría ser el exalcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi. De confirmarse estas salidas, el Consell quedaría integrado por nueve consellers de los cuales seis serían hombres y tres mujeres.
Lo lógico sería que existiera alguna nueva incorporación pero, eso sí, debería ser una mujer para no dañar una cuestión de imagen importante como es la paridad. En estos términos, fuentes de la Generalitat aseguran que se le daría fuerza a Paula Sánchez de León, quien se situaría como número dos del Gobierno, si es que crea el puesto, ya que Camps ha manifestado sus dudas sobre la desaparición de las vicepresidencias.
En cualquier caso, la entrada de cualquier miembro novedoso más en el Consell implicaría la salida de un 'peso pesado' varón, a no ser que Camps quisiera dejar un Ejecutivo plagado de hombres y casi sin mujeres. Una nueva incorporación haría, por tanto, salir a Gerardo Camps,
Juan Cotino, Serafín Castellano, Vicente Rambla, Manuel Cervera o Rafael Blasco.
No es descabellado: el propio conseller de Economía, Gerardo Camps, apunta su futuro en dirección a Madrid; el vicepresidente tercero y conseller de Medio Ambiente, Juan Cotino, lo hace en la misma línea. También podría haberse agotado el periodo de primera línea del conseller de Gobernación, Serafín Castellano, aunque algunos defienden que se sostendrá al haberse erigido como referente del desarrollo estatutario. Vicente Rambla, uno de los fijos a priori, se encuentra salpicado en el caso Gürtel, aunque fuentes de la Generalitat aseguran que "repetirá sin duda".
LA CUESTIÓN TERRITORIAL
Respecto al equilibrio provincial que suele darse en la constitución del Gobierno valenciano, todo apunta a que las novedades vendrían desde Alicante. La representación castellonense parece clara si Font de Mora es presidente de Les Corts: Manuel Cervera y Vicente Rambla, también de esa circunscripción, no deberían fallar en el Ejecutivo. Se ha especulado sobre la posible entrada de la diputada nacional Andrea Fabra, hija del líder provincial Carlos Fabra, si bien fuentes del PP en Castellón insisten en que la dirigente prefiere prolongar su estancia en Madrid. Se habla de alguna dirigente de Castellón como Marisol Linares o Carmen Amorós para el segundo escalón del Gobierno autonómico.
Por Valencia, aparecerían los nombres de Paula Sánchez de León, Maritina Hernández, Rafael Blasco, Serafín Castellano y Juan Cotino. Por Alicante, todos los actuales son dudosos, aunque Angelica Such es la que tiene las opciones más altas de repetir, según las fuentes consultadas.
Es evidente que, si Font de Mora ejerce de presidente de la Cámara (cuota de Castellón) y Paula Sánchez (por Valencia) tiene un puesto destacado en el Ejecutivo, contando además con que el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, concurre también por Valencia; la presencia de los consellers alicantinos debería incrementarse. La mayoría de fuentes consultadas da por hecho la inclusión en el Gobierno valenciano de José Císcar, uno de los activos importantes para Camps en Alicante. Es probable entonces que haya otra entrada, en este caso femenina por esta provincia. Fuentes consultadas creen que si hay una fusión de carteras de Cultura y Turismo -en Murcia y Galicia, gobernadas por el PP, están juntas- la diputada benidormense Angela Barceló, sería "una buena opción".
Las cábalas son variopintas y la mayoría de dirigentes consultados afirman de forma escueta: "Eso sólo lo sabe Camps", en referencia a las sorpresas que suele dar el jefe del Consell en este tipo de nombramientos. Los que se atreven a especular incluso creen que puede reducir aún más las carteras a repartir, lo que supondría, casi con total seguridad, la salida de más 'clásicos' del Gobierno valenciano. No obstante, si se ajusta a criterios de territorialidad y paridad, todo indica que las novedades pueden provenir de Alicante: José Císcar y alguna incorporación femenina por Alicante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario