Mariano Rajoy, incluyó dentro del programa del Partido Popular que sometió a todos los votantes y no es así como lo ha cumplido. Ha fallado primeramente a todo su equipo de gobierno, a los votantes igual, durante más de tres años hemos estado con esa dichosa reforma que presionada desde la curia sacerdotal española nos impuso a todos. Acometió una reforma que todos los españoles hemos pagado, pues hasta conseguirla imaginamos que habrán movilizado a todo el equipo jurídico de su gabinete, así como a muchos de sus funcionarios y todo esto cuesta su dinero. Es igual , pagarán los contribuyentes, se diría el presidente que, en aras a la obtención de unos votos que les perpetúen en el gobierno, han preferido dar de lado a su Proyecto Bandera.
Se ha ido dando un portazo, no cabe duda, pues se le notaba tenso, como reprimido de las verdaderas causas presentadas para su dimisión. En definitiva le han traicionado sus compañeros de equipo quienes le encargaron semejante trabajo.
Este es el principio del fin que se conseguirá plasmar cuando pierdan las elecciones. Si, cuando pierdan las elecciones, pues aunque las ganen no se van a librar del gran batacazo electoral que en buena lid se han ganado.
Todo se lo juegan a una carta, electoral, por supuesto, ya que la retirada de esta Ley se realiza para intentar arrancar unos votos que se le han escapado ya, si, pues no habrá ningún trabajador que les ratifique, sobre todo los miles, millones de trabajadores que hay en el paro.
No cabe duda que lo han hecho por buscar esos votos que les retiran las encuestas.
De verdad que no hay nada más tonto que un trabajador votando a la derecha. ¿Que será lo que pretenden sacar, petróleo? Pues dinero ya se lo han llevado todo el que había, ahora, ahora solo les queda miseria.
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