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Durante mucho tiempo venimos observando una prudencia que se ha llegado a confunir, por parte de Nuestro Consell valenciano, ante los hechos que contemplamos y que merecen nuestra consideración de aberrantes. No es posible aceptar de buen grado el desprecio que hacen de nuestro colectivo sin más que la opacidad tras unas promesas incumplidas y tomadas con un una incomprensible irresponsabilidad.
¿De que sirven esas vacías palabras que pronuncian ante nuestros oídos, para despues olvidar que estuvimos en la calle presionándoles ante sus malas acciones?
Es evidente que los acontecimientos nos llevan con toda celeridad ante la privatización descarada de nuestros más prosperos servicios sociales conseguidos con nuestro esfuerzo. Ahora están comenzando por los educativos, también por los sanitarios y cuando estos desaparezcan totalmente de nuestra posible utilización, será para sanar exclusivamente a quienes tengan posibilidades para pagar sus servicios, de otro modo ya sabes cual saber podría llegar a vuestro final, el mismo que les supone a esos noteamericanos que no pueden costearlo como ya comienzan por aqui a tenerlos más de una familia al completo.
Entre los esquimales ya conocemos cual podrá ser el final de sus días. Se abandonan en medio de la tundrá para que los osos polares realicen su trabajo cuando llegue su final, pues ya que no pueda comer ni pagarse un pedacito de cementerio que no existe que otra opción les queda. Eso es así de sencillo, el mismo final nos espera a nosotros dentro de poco tiempo y si es que todos nosotros no se lo impedimos al partido del gobierno.
Antes nos quedaba el consuelo de ingresar en una residencia geriátrica, ya que el gobierno tenía unos recursos que paliaban nuestra final situación, por sus servicios sociales obteníamos su ingreso y algunos, según sus ingresos, hasta hacían una especial contribución, pero siempre podíamos asegurar cual sería nuestro final. Pero ahora en quien confiar cuando un gobierno inhumano privatiza con descaro todos tus medios sociales, después no los puedes pagar y aquí comienzan tus males.
Ves cual es la situación y comienzas a desesperar, no te paga la Generalitat y quedas al pairo, en el aire, no puedes ir ni a Bonaire, ves como unos pocos privilegiados viven gracias a ti, sus cometidos son apreciados pese a estar imputados, sus sueldos siguen creciendo, los tuyos siguen menguando, hasta que vemos que cuando antes acudias a la Casa Real, siempre recibías un sabio consejo , pero ahora tiene un imputado que te ofrece un mal espejo y tus esperanzas esfumado. Si escuchas sus noticias nada te aclaran al final, no entiendes que pasa, esto tiene mucha guasa, que justicia hay en España que premia a los impostores y aquí estamos los menores, quienes no tienen privilegios ni que tirarse a su boca, en quedará la cosa si no tenemos donde acudir. Esto es un mal devenir, que me lo expliquen...
Yo no es que haga política, la política me hace a mi, que imite a mis defensores y mal ejemplo me dan, todo este es mi mal, acude pués a la concentración, solo espero la solidaridad de todos mis compañeros.
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