Por Mª Ángeles Sierra.
Cuando la luz y el sonido duermen,
renacen el silencio y la oscuridad.
Se oculta la transparencia,
florece el oscurantismo.
Los tiempos que un día fueron
no vuelven a ser los mismos
Pasas página de un libro.
Escribes sobre hoja en blanco
otra vez; una vez más.
Esta vez tiembla la mano,
hay poco ya que contar.
Las fuerzas se han acabado,
la esperanza se murió,
amor que se ha marchitado,
que con amor no pagó
Un seco recuerdo aflora y llora frente a tu alma.
Le observas con ironía, le acaricias con tu calma,
le consuelas con tu temple, le dices:
“No pasa nada.
Cuanto fue hubo de ser,
Cuanto no fue, no se acaba,
Cuanto debiera haber sido,
no fue más que una esperanza.
Tenemos que pasar página.”
Y la página se pasa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario