Y todo por un estornudo

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Por César Giménez

Decir María Ángeles García Moreno es prácticamente como hablar en chino. A esta mujer, con suerte, igual la conocen en su casa a la hora de comer. Y no es mala gente, creo; más bien, la consejera de Educación y Ciencia de Castilla La Mancha es embustera, ignorante y tan buena defensa que es inminente su fichaje por algún grande del fútbol europeo.

Por ahora se tiene que conformar con ser lacaya del aprendiz de sátrapa Barreda. Pero como buena lacaya aprende rápido a pasar la bola (bola desde Ciudad Real hasta Toledo y vuelta). Y es que después del buen talante mostrado por diputados el martes (el ex-ministro Caldera, la ex ministra Pastor entre otros) ante las promotoras de la iniciativa 'Inclusión en el Pacto Educativo de Estado', los padres de niños con necesidades educativas especiales han aterrizado de nuevo en nuestra España de los reinos de taifas. Y la cruda y deplorable realidad por el momento se impone.

Al día siguiente del sarao gubernamental de los diputados nacionales, los padres del niño Jesús tenían concertada una cita con la consejera de Educación de su comunidad. Las palabras con las que la describo no son insultos gratuítos. Es embustera cuando afirma que "reciben un 50% menos de dinero para educación" para inmediatamente subrayar que, a pesar de todo, han aumentado los profesores de apoyo. Las cuentas no salen; los cuentos, sí.

Su ignorante condición hace incapaz a esta mujer para desempeñar cualquier cargo de responsabilidad. Ya el preámbulo de la Ley orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación (LOE) habla de que "la adecuada respuesta educativa a todos los alumnos se concibe a partir del principio de inclusión, entendiendo que únicamente de ese modo se garantiza el desarrollo de todos, se favorece la equidad y se contribuye a una mayor cohesión social. La atención a la diversidad es una necesidad que abarca a todas las etapas educativas y a todos los alumnos. Es decir, se trata de contemplar la diversidad de las alumnas y alumnos como principio y no como una medida que corresponde a las necesidades de unos pocos".

Si la consejera desconoce la LOE, apaga y vámonos.

Por otro lado, ignora también una importante ley en España como es la Convención internacional de los derechos de las personas con discapacidad.

Entre otros, se incumple el Artículo 24 que se refiere a Educación. Dice que  "los Estados Partes reconocen el derecho de las personas con discapacidad a la educación. Con miras a hacer efectivo este derecho sin discriminación y sobre la base de la igualdad de oportunidades, los Estados Partes asegurarán un sistema de educación inclusivo a todos los niveles...".

Se podría citar también el artículo 27 de la Constitución, muchos de cuyos puntos se incumplen, pero eso ya sería recochineo hacia la ignorante consejera.

Y no, no creo que pujen por su valor como futbolista, aunque despeje bien. Pero culpa a personal técnico contratado por su consejería por informes que reconocen los males académicos de Jesús en un centro especial frente a sus resultados en un colegio ordinario. Al mismo tiempo, tiene la idea de enviar al niño a las mismas personas para que se volviera a hacer otra valoración.

Yo me pregunto que en qué tómbola se obtiene una consejería en Castilla La Mancha.